La NASA realiza una prueba de fuego caliente del cohete más potente que jamás ha construido para que los humanos vuelvan a pisar la Luna en 2024.
El test —realizado el sábado en el centro espacial John C. Stennis de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio de EE.UU. (NASA, por sus siglas en inglés) en Misisipi— consistió en encender los cuatro motores RS-25 simultáneamente durante 8 minutos para simular el rendimiento de la etapa central del cohete, el Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS), durante el lanzamiento.
El SLS es el único cohete que puede llevar a la Luna la nueva nave espacial Orion, astronautas y suministros en una sola misión, por lo que representa la columna vertebral del programa espacial Artemis.
Su objetivo es “volver a la Luna de una forma sostenible para preparar el próximo salto gigante: enviar por primera vez astronautas a Marte”. La agencia pretende llevar a la primera mujer y al próximo hombre a la Luna en 2024.
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